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Lugares de interés

A continuación algunos lugares de interés:

Posada del Cojo

La Posada o Mesón del Cojo sirvió de parada en su viaje a Cádiar del que pretendiera ser rey de Granada, Aben Jaguar, tío de Aben Humeya, llamado el reyezuelo. Algunos cronistas aseguran que durante la Navidad de 1568 se ultimaron en esta posada los detalles de los hechos tan relevantes en la historia de la Alpujarra como la coronación de Aben Humeya

Más tarde La Posada del Cojo sirvió de alojamiento a don Juan de Austria, que tal como cuenta la tradición, anduvo persiguiendo para tener amores con la hija del posadero aunque tuvo que salir huyendo por los terraos (tejados) para escapar de su furia.

El Mesón del Cojo a finales del siglo XVIII sirvió de posada a mercaderes que se desplazaban de distintas regiones españolas para realizar compras y ventas en Cádiar, donde se celebraba un importante mercado.

El prestigio de este inmueble también aparece documentado en las primeras décadas del siglo XX, que acoge a conocidos intelectuales de la época, como por ejemplo el círculo de Bloomsbury, que acude a estos lugares con motivo de su estancia en el pueblo alpujarreño de Yegen del célebre Gerald Brenan (conocido por don Gerardo) autor del libro ‘Al sur de Granada’.

Iglesia Santa Ana

La iglesia de Santa Ana de Cádiar fue construida en la segunda mitad del siglo XVI a raíz de la destrucción de la conocida como «iglesia vieja´´ durante la »Revuelta de las Alpujarras» por parte de la población morisca, edificio que se situaría en la Plaza de España de Cádiar. En un primer momento la iglesia de Cádiar estaba dedicada al culto de la Encarnación, pero ésto se vería modificado en 1763, cambiando y estableciendo como patrón a San Blas y a Santa Ana, esta ultima otorgándole su nombre.

De construcción renacentista, la iglesia de Santa Ana presenta una planta de cruz y construcciones de contrafuertes, presentando como material principal la piedra poseyendo un torreón y un tejado a cuatro aguas.

Molino de Enmedio

El Molino de Enmedio es un molino del siglo XVI que recibe su nombre por el hecho de estar situado entre otros dos molinos, pese a que estos son más modernos que el que estamos tratando. Los molinos entre los que el Molino de Enmedio se encuentra, se localizarían en la Plaza del Prado, al norte, y el molino que se situaba en la Plaza del Calvario, al sur.

El Molino de Enmedio estaría construido bajo un edificio de tres plantas con una cubierta hecha de mampostería y su función consistía en, utilizando una caída de agua de una altura considerable, conseguiría la fuerza necesaria para poder hacer rotar la piedra del molino.

Ermita de San Blas

La Ermita de San Blas data de finales del siglo XVII y principios del siglo XVIII y se encuentra en la llamada Plaza de la Ermita, situada en el Barrio Bajo, es decir, el casco antiguo del municipio de Cádiar. Se trata de un pequeño edificio de carácter religioso en honor a San Blas, imagen que se encuentra dentro de la estructura.

Dicha ermita presenta una planta cruciforme, sistemas abovedados de medio cañón, con retablos en el interior. En el exterior presenta materiales de construcción como es la mampostería o el ladrillo. El edificio se encuentra coronado por una torre en la cual se encuentra el campanario.

Casa de los Chacón o Ayuntamiento

La conocida como casa de los Chacón se trata de un edificio nobiliario de grandes dimensiones que según la tradición, estuvo en poder de Aben Jaguar, tío de Aben Humeya. Posteriormente y tras varias ocupaciones y restauraciones, en el siglo XVIII se le dio un carácter barroco, sufriendo un gran deterioro en la Guerra Civil. En la actualidad y tras su restauración, es el lugar en el que se encuentra el Ayuntamiento de Cádiar.

Se trata de un edificio de carácter palaciego en tres alturas. La parte más alta recibiría el uso de despensa y almacenamiento, la planta intermedia sería la zona de vivienda de la familia mientras que la parte inferior presentaría un recibidor. En la parte posterior del edificio encontramos un patio con una fuente en el centro y restos de columnas que sostendrían un techado. El exterior encontramos una fachada construida con ladrillos salientes y diferentes balcones.

Fuente del Vino

La fiesta de la Fuente del Vino, realizada en la plaza de la iglesia de Santa Ana, está declarada como Bien de Interés Cultural (BIC) por la Junta de Andalucía desde el año 2008. Se trata de una fuente gratuita de vino cuyos caños sacian con vino a todo aquel visitante que se acerca durante la feria de Cádiar (a principios de octubre). La fuente se ubica en la Plaza de la Iglesia y fue creada en 1967 por un grupo de amigos (Enrique Morón, Francisco Dumont Álvarez, Manuel Tarifa López y Luis Rodríguez Zapata). Desde entonces quedó como tradición de la localidad y la estructura de la fuente fue cambiando con el tiempo, siendo muy simple durante los primeros años. En el año 2014 se construyó una Fuente del Vino definitiva en un estilo más racionalista a modo de rotonda con una fuente de agua decorada con un poema de Enrique Morón. La importancia de la Fuente del Vino se da por su valor cultural más que por su valor monumental o arquitectónico.

La actual Fuente del Vino de Cádiar, se compone de dos ambientes diferenciados unidos que presentan dos grandes muros curvos que acogen al visitante con los brazos abiertos. Es decir, encontramos una doble fuente unida entre sí obra de la arquitecta Raquel Ruiz Monge. El muro curvo blanco nos adentra en la primera parte de la fuente. Con tres caños, esta parte está dedicada al deleite del vino, a fines lúdicos o como punto de encuentro. También encontramos cuatro pilares que simbolizan a los cuatro fundadores de la Fuente del Vino. El otro muro curvo de piedra caliza abre un segundo ambiente dedicado al descanso, a la reflexión y al recuerdo. Presenta una fuente redonda de agua revestida de piedra caliza en la que cae el agua desde cuatro grandes hojas de parra de bronce. El muro curvo presenta también una dedicatoria y un poema de Enrique Morón. El color de la piedra caliza, a su vez, se envuelve y une al color de la fachada de la iglesia de Cádiar creando un vínculo arquitectónico.

Tinaos de Cádiar

Los tinaos se tratan de unas estructuras urbanas localizadas en las calles que se tratan de una especie de construcciones que realizan diferentes funciones, entre las cuales se destacan el uso a modo de refugio contra las inclemencias del tiempo, conexiones entre calles o por ejemplo un lugar de quedada con un fin socio-comunicativo. Estos tianos se datan de fechas anteriores a la primera mitad del siglo XX y sobre ellos podemos encontrar viviendas o terrazas.

Dentro de los tinaos de Cádiar encontramos los de la Calle Real, la calle Cristal, « el tinao de Juarez Nieto´´  y el de la calle Baja.

Plaza del Prado

Plaza situada a escasos metros del río Guadalfeo, al pie del municipio de Cádiar. En esta plaza podemos encontrar una fuente en el centro de la misma que sirve además como abrevadero para los animales. Según los escritos, en esta plaza se edificó en época musulmana una serie de construcciones relacionadas con la elaboración de diferentes productos entre los que destacamos una fabrica de anís e incluso una almazara, edificaciones que actualmente no están específicamente  localizadas.

Anejo de Narila

Se conoce como el «Anejo de Narila´´ al camino situado entre Cádiar y Narila. Se trata de una conexión de un kilómetro de longitud aproximadamente entre ambas poblaciones en donde se puede observar diferentes lugares de interés. Entre estos podemos destacar la gran balsa de Narila, de época musulmana, o el famoso «Olivo del Moro´´, lugar en que se corono a Aben Humeya como rey de las Alpujarras tiempo antes de que diera comienzo la rebelión. Además, en estas inmediaciones se situaría la conocida hacienda de Aben Aboo, lugarteniente de Aben Humeya, unos terrenos pertenecientes a éste que por el momento no se han localizado con exactitud.

Río Guadalfeo

El río Guadalfeo nace en Sierra Nevada, en el municipio de Bérchules, pasando por Cádiar y desembocando en el mar Mediterráneo, en Salobreña.

Conocido también como río de la Sierpre o río de la Victoria, el Guadalfeo discurre por el valle que recibe el mismo nombre, pasando de forma muy caudalosa por el costado izquierdo del municipio de Cádiar, bañando unas orillas muy fertiles en las que podemos observar como crece una rica flora y habitan numerosas especies de animales, pudiendo realizar rutas de paseo para los amantes de la naturaleza.

Mirador de La Paloma

Situada en la entrada a Cádiar por la carretera A-348, encontramos un amplio mirador con la disposición de un merendero desde el cual se puede disfrutar de unas magníficas vistas del Valle del Guadalfeo y del casco antiguo del municipio. Además, en el Mirador de la Paloma podemos encontrar una escultura de piedra obra de Antonio Cortés.

 

 

Plaza de la Iglesia de Santa Ana

Plaza en la cual podemos encontrar la Iglesia consagrada a Santa Ana junto a otras construcciones importantes entre las que se destacan el antiguo cementerio de Cádiar, el mercado de abastos, y la famosa Fuente del Vino, siendo esta el centro urbano que divide el casco antiguo del nuevo, además de ser el lugar principal en que se desarrolla la Feria de Cádiar entre otras festividades.

 

Plaza de España

En esta plaza podemos encontrar la que se conoce como Casa de los Chacón, anteriormente perteneciente a Aben Jaguar, tío de Aben Humeya, y que actualmente es el Ayuntamiento de Cádiar. Según la tradición, en esta plaza se encontraría la que es conocida como Iglesia vieja, un edificio construido en madera principalmente, lo cual facilitó su destrucción en la llamada Rebelión de las Alpujarras por parte de la población morisca.

Castillejo

Situado en el barrio que recibe su nombre, el Castillejo fue en época musulmana una construcción con fines militares construida entre los siglos XIII y XIV. Aunque su conservación actual es de un grado muy débil, se plantea realizar labores de mantenimiento y conservación por parte del Ayuntamiento de Cádiar. Lo que se conserva a simple vista del Castillejo son los muros laterales recubiertos de mampostería y unas posibles caballerizas, algo casi milagroso, pues se edifico una casa contemporánea utilizando los restos de este antiguo castillo.

Destilería de José Lara

A día de hoy no se conserva la destilería de José Lara, aunque ha sido posible recuperar algunas de las maquinas que se utilizaban para la fabricación de gaseosas y otros líquidos, situadas en la entrada del pueblo junto al parque de bomberos.

El Barrio Bajo

El Barrio Bajo es el nombre actual que recibe el casco antiguo de Cádiar de época musulmana. En el podemos encontrar lugares como las antiguas alfarerías musulmanas, la ermita de San Blas, localizada en una plaza del mismo nombre, la plaza del Calvario, situada en la parte más baja del Barrio Bajo, en la que encontramos una fuente. Debajo de esta última se situaría la antigua Plaza del Calvario, que se reemplazó por la que actualmente encontraríamos.

Para concluir, mencionamos también la llamada calle Baños, una calle de este barrio que recibe este topónimo debido a que en ella se encontrarían los antiguos baños árabes, edificio en el cual se está trabajando para poder localizarlo de una forma más exacta.

Puente del Barranco de Pedro Conde

Puente de época musulmana situado junto a la Acequia Real a la altura de Narila. Se trataría de un acueducto construido para salvar la distancia entre una ladera y otra del Barranco de Pedro Conde. Según la información conservada en los archivos, este puente se encontraba aquí desde incluso antes de las repoblaciones de cristianos tras la expulsión de los moriscos de la Alpujarra. Debido a la escasez de información, se pretende realizar labores de estudio y protección del mismo como patrimonio de Cádiar.

Puente del Barranco de Martín Alonso

Puente de construcción musulmana situado en el llamado Barranco de los Conejos, accidente geográfico localizado perpendicularmente al río Guadalfeo en dirección suroeste a Cádiar. De esta estructura no poseemos ninguna información clara, por lo que se pretende realizar futuras intervenciones para su investigación y protección, como pasaría con el Puente de la Acequia Real.

Minas de Cádiar

El municipio de Cádiar posee cuatro minas localizadas dentro de su territorio, dos de plomo conocidas como la mina de Isabel y la mina de San Blas en el Cerro del Portel, y dos de plata que reciben el nombre de «El Orgullo´´ y «La Encantada´´.

Ruta histórico-cultural

RUTA HISTÓRICO -CULTURAL POR EL ANTIGUO CAMINO REAL DE CÁDIAR Y NARILA.

BARRIO DEL CASTILLEJO.
Núcleo primitivo y originario de Cádiar. En crónicas del siglo XII, el geógrafo Idrisi menciona un his-al-Qadir (castillo) en la descripción de la ruta de Almería a Granada. En época musulmana se llamaba barrio de Alcudia. Por este barrio discurría el antiguo Camino Real de Cádiar a Narila y Bérchules. En los años cuarenta del siglo XX, en la parte alta del barrio se construyó el primitivo depósito de las aguas potables. El Castillejo está separado del núcleo principal por el barranco de Pedro Conde (Éste, aparece en la relación nominal de los nuevos pobladores, con una suerte), en el que se encuentra un frondoso y centenario moral. Presumiblemente, en este barranco, dirección noreste, se encuentra un puente- acueducto morisco, con arco de herradura, para canalizar el agua de la Acequia Real. En 1834, el Barranco sufrió un voraz desbordamiento tras un impetuosa y aterradora tormenta.

PLACETA DEL PRADO.

En época musulmana, barrio de Hopra. Hasta mediados del siglo XX, contaba con molino harinero, almazara, fábrica de aguardiente y bar. Típica y secular fuente, bajo el nivel del suelo.

CALLE RUEDA.

En época musulmana, barrio de Haratalzoco. Era el camino secular y vertebrador del trazado longitudinal del pueblo. Elementos: un moral, testigo del pasado musulmán, el caz para suministrar agua a los molinos del Calvario y del En medio, el cual se nombra en el Catastro de la Ensenada.

CALLE BAJA.

Calle de trazado longitudinal, discurre paralela a la calle Real y ambas entran en contacto a través de callejones con cuestas y “tinaos” (elemento original de la arquitectura tradicional alpujarreña). La calle Baja, de carácter musulmán, es estrecha e irregular. Antiguamente, esta calle comunicaba los distintos barrios moriscos del Barrio Bajo: Humo (Haratalahax), Presidio (Haratalachox) y Calvario (Haratalzamara) con los del Barrio Alto: Rueda o Barrio de la Iglesia (Haratalzoco), Prado (Hopra) y Castillejo (Alcudia). Según el arabista Manuel Gómez Moreno, antes de la revolución morisca, en Cádiar había seis barrios. A mediados del siglo XX, la calle era un hervidero de niños y de familias, pues contaba con un par de panaderías, un taller de artesanía de esparto y una minúscula taberna.

BARRIO DE LA ERMITA.

En la ermita de San Blas, situada en el Barrio Bajo, se venera la imagen del patrón del pueblo. En los primeros años del siglo XVIII, los campos de la villa sufrieron una plaga de langosta y una vez que termina, sin grandes consecuencias, se hizo voto de ofrecer una ermita, en 1710, y dar culto “al Señor San Blas”, según consta en el Archivo de la Chancillería de Granada.

Fue construida en la primera mitad del siglo XVIII, en estilo neoclásico. Tiene planta de cruz latina y está cubierta con bóveda de medio cañón. La capilla mayor es rectangular y, en la parte central, se encuentra la hornacina del patrón S. Blas. La portada primitiva, de arco de medio punto con pilastras toscanas y pirámides sobre entablamento

La Era de la Ermita, ha sido históricamente un lugar de encuentro, bullicio social y de cierta actividad físico-lúdica de los cadiareños, contaba con panadería y taberna. Hasta bien entrados los años 60 del siglo XX, se seguía trillando alguna que otra parva pequeña (garbanzos). En este barrio se encontraba la centenaria alfarería de los hermanos Rodríguez, con sus balsas, su torno y los hornos para la cocción de los pipotes, orzas, cántaros lebrillos…

MIRADOR DE LA PALOMA.

Bella panorámica del valle del río Guadalfeo, la era de la Cruz y de los pueblos de Narila, Alcútar y Bérchules. Pedro Antonio de Alarcón, en su viaje a La Alpujarra, en 1872, a su llegada a Cádiar expresó: “¡Asombro causa que ni siquiera sea Villa, cuando tantas ciudades quisieran tener su historia y su hermosura…! (…) Sus grandes casas rodeadas de huertas y jardines, sus oscuros olivares, su refulgente río, sus floridos campos”. Hay una escultura reciente del cadiareño Antonio Cortés.

EL PORTEL.

En El Portel, palabra de origen latino, por su situación estratégica y encrucijada de caminos, probablemente, hubo un poblado romano-visigótico. Cádiar tiene toponimia árabe.

Tanto Albayar como El Portel fueron alquerías en la época musulmana; esta última contaba con mezquita mayor. En el año 1527 se le nombra ya como barrio de Cádiar. Según El Libro de Apeos, en el siglo XVI había mesón, bodega y algunas casas. En el siglo XVIII, según el Catastro de Ensenada, había un pequeño molino de aceite, propiedad de D. Antonio de la Plata, presbítero y vecino de Cádiar. Dicha almazara recibía el agua de la acequia del Portel. Pedro Antonio de Alarcón, en su libro La Alpujarra, refiriéndose a la Rambla del Portel, nos habla de una encrucijada de cuatro veredas.

En el Siglo XIX, según expedientes mineros, se citan cuatro yacimientos en el pago del Portel: Isabela, de plomo; Encantada, de plata; mina el Orgullo, de plata y la de S. Blas, Cerro del Portel, de plomo.

MIRADOR DE LA ERA DE LOS MARTOS.

Panorámica de Cádiar. Recientemente se ha levantado una isleta o redondel con: un olivo, un letrero en bronce con el topónimo, así como unos artilugios de la antigua fábrica de gaseosas de los hermanos Jorge y Paco Lara.

CALERA MORISCA DE LA RAMBLA DEL HIGUERAL.

Esta calera es un horno troncocónico, de unos tres metros de altura, de planta circular, en el caso que nos ocupa de grandes dimensiones, y tiene la peculiaridad de que está excavado en la roca carbonatada, a base de cincel y martillo. Además, dispone de pequeños respiraderos a lo largo de las paredes y presenta una abertura, a modo de puerta, para la carga y extracción de la cal.

CUBO DEL PRIMITIVO MOLINO MORISCO EN EL MOLINILLO.

En el pago del Molinillo se conserva el cubo de un antiguo molino, que se encuentra recubierto de barro y algún azulejo. En el municipio, los molinos toman el agua del caz o acequia del río y es embalsada en el interior de una sólida torre, llamada cubo (tiene unos seis metros de altura), con el fin de alcanzar presión para la molienda.

BALSA Y RESTOS DE LA ANTIGUA ALFARERÍA

Se encontraba en el pago del Rincón, cerca de la acequia de las Granjas. Estuvo en funcionamiento hasta principios del siglo XX. También había otra en la Cuesta Torres, cerca de la Ramblilla. Sin duda, la más relevante fue la situada en la calle de la Alfarería, que pertenecía a los hermanos Rodríguez, en ésta se hicieron cántaros, pipotes y lebrillos hasta bien entrados los años ochenta del siglo XX.

CALLE REAL Y PLAZA.

La calle Real, generalmente de trazado longitudinal, se puede considerar una calle de repoblación cristiana, al igual que la Plaza de la Iglesia. Cuenta con un trazado más ancho que la calle Baja, de carácter musulmán. Ésta formaba parte del antiguo Camino Real, camino secular y vertebrador. Cuenta con algunas casas de porte hidalgo. Destaca la Posada o el Mesón que es un inmueble de planta rectangular, cuenta con dos alturas y cámara construida en mampostería con cubierta a dos aguas de teja árabe. Este edificio rompe con la tradicional casa alpujarreña. En el siglo XVIII, el Catastro de la Ensenada señala que en el pueblo había un mesón regentado por el francés Pedro Vrisiel, quizá se refiera a esta posada, ubicada en la Placeta del Mesón. Además, en el Calvario, se encontraba la posada de San Blas, y en la Plaza de la Iglesia, la “Posailla”. Hasta los años setenta del siglo XX, tanto la calle Real como la calle Real Baja, incluido el Calvario, era un rosario de tiendas de comestibles, de quincalla, de tejidos, panaderías, almazara-molino, herrador, carpintería, ferretería y derivados, talabarterías, sastrerías, barberías, peluquerías de señora zapaterías, tabernas, bares, estancos, fábrica de aguardientes y gaseosas y de tejidos, así como casas con máquinas de tricotar y hasta un espacioso salón de cine, acercándose a la cincuentena de establecimientos.

En el centro de la Plaza de la Iglesia se encuentra la Fuente del Vino, construida en el año 2014 tras ganar el concurso convocado por el Ayuntamiento, la arquitecta Raquel Ruiz Monge. En sus paredes se encuentra un poema del poeta Enrique Morón, así como una exposición de fotografías antiguas y noticias de la hemeroteca, con motivo de su cincuentenario.

IGLESIA PARROQUIAL DE SANTA ANA.

Fue construida a mediados del siglo XVI, entre 1562-1566, bajo cánones renacentistas, pero con marcadas tendencias de estilos anteriores, principalmente del arte visigótico. Tiene planta de cruz latina con una sola nave y cubierta por bóveda con arcos fajones; el crucero cuenta con bóveda de arista. Fue la única iglesia abovedada en el siglo XVI y hasta el siglo XVIII en la Alpujarra. Dispone de ventanas de un solo hueco. La portada principal es de medio punto con dovelas de arco.

AYUNTAMIENTO.

Casa señorial de principios del siglo XVIII en estilo barroco y autor desconocido. Consta de tres plantas; la segunda planta está coronada por frontones curvos barrocos y balconadas de hierro. La puerta principal de entrada es de madera de doble hoja y portillo, claveteada de herrajes. En el año 1985, fue declarada monumento histórico-artístico. En octubre de 1991 se inaugura como Casa Consistorial. En la parte superior (las cámaras) hay una exposición de fotografía antigua sobre la Feria, así como otra moderna.

ANTIGUA CASA CUARTEL.

Construida en la segunda mitad del siglo XIX, rehabilitándose en el año 1935 y se añade un cuerpo en los años cuarenta del siglo XX. La fachada consta de tres cuerpos divididos por una moldura, cada uno por cinco vanos adintelados. El inferior e intermedio presenta ventanas con rejas de antepecho, salvo un balcón situado en el centro; el superior presenta ventanas de menor tamaño. El edificio cuenta con cubierta a dos aguas de teja árabe sobre estructura de madera. Hasta la primera década del siglo XX, este edificio estuvo dedicado a escuela y ayuntamiento; después, hasta los años noventa, se instaló el cuartel de la Guardia Civil.

NARILA.

De origen hispano romano, de su término formó parte una pequeña hacienda propiedad de Abenabó, lugarteniente de Aben Humeya. También fue patria del monfíe Cristóbal Partal, jefe morisco y propietario en el pueblo.

IGLESIA PARROQUIAL DE SAN ESTEBAN.

La iglesia de Narila se construyó por los años 1548-1549, siendo albañil Luis Navarro. En el año 1555 continúan en los trabajos Acacio Hernández, albañil y Bartolomé Vallejo, carpintero; la iglesia cuenta con una sencilla nave y los muros eran de ladrillo y mampostería (hoy, enlucidos de cal); el primitivo artesonado era mudéjar. En el siglo XVIII, se añade la capilla mayor con un artístico e interesante retablo barroco; hoy, tanto el artesonado como el retablo no se conservan. La portada se encuentra en el lado izquierdo con un arco sin decorar. La torre, a los pies, de finales del siglo XVI o principios del siglo XVII, es de ladrillo, destaca por su robustez y consta de un alto cuerpo prismático y campanario con dobles vanos rehundidos y alero con molduras.

ALQUERÍA HARAT-ANDON

Según el arabista Isidro de las Cagigas, en “Topónimos alpujarreños”, en época morisca y en el camino Real de Cádiar a Narila se encontraba la Alquería de Harat-Andón, que pertenecía tanto a Cádiar como a Narila. Ésta contaba con una rábita (ermita). El Haza del Moro, propiedad del cadí don Fernando el Zaguer (Aben Xaguar), probablemente pertenecía a esta alquería. En esta haza se encuentra el olivo que, según la tradición, fue coronado Aben Humeya rey de los moriscos.

CASA DE ABEN HUMEYA.

En el Barrio de Pajares, (en época musulmana se llamaba el Xia) de inspiración norteafricana, se encontraba, hoy derruida, la casa que quizás perteneció a su tío Aben Xaguar, “el Zaguer” o al monfíe, Cristóbal el Partal y que le sirviera de lugar de descanso a Aben Humeya. Era un edificio de planta poligonal, de dos alturas, construido en mampostería enfoscada con cubierta plana de launa y alero de lajas.

Según el diario Ideal,17-10-1991, “La casa se caracteriza por su antigüedad y tenía puerta con sus clavos de flor de lis; además, tenía un patio central y contaba con acueducto interno para el reciclaje del agua de lluvia y disponía de grandes cuadras para las caballerías”

POBLADO O ASENTAMIENTO EN EL CERRO GALLEGO.

La profesora Carmen Trillo, en su libro La Alpujarra antes y después de la Conquista Castellana, señala: “Al norte de la actual población, en la margen izquierda del río Guadalfeo, se encontraba, sobre un peñón que domina el valle desde una altura de unos 1.150 ms., un antiguo poblado de época alto-medieval”, en torno al siglo VIII. Este asentamiento urbano podría ser anterior al mismo pueblo de Narila y cuyos pobladores se bajaron después a la rica llanura del Guadalfeo.

BALSA DE NARILA.

En el año 1837, Policarpo de Castro, síndico del ayuntamiento de Cádiar pide permiso a la Diputación de Granada para la construcción de un estanque con objeto de regar la Vega. El presupuesto se estima en seiscientos ducados.

CÁRCAVO O CÁRCAMO DEL MOLINO ALTERO O DE LA MOLINETA

Cerca de la Fuente del Agua Agria. Se trata de una estructura abovedada, de medio cañón, desde donde sale el agua del molino que se reintegra a la acequia o al río.

YESERAS DE NARILA

En la margen derecha del Rio Guadalfeo, cerca del Agua Agria, se encontraban las yeseras (hornos) de Frasquito el “Yesero” y la del “Viejecico”. Estuvieron en funcionamiento hasta bien entrados los años sesenta del siglo XX.

MIRADOR DEL CERRO DE SANTA RITA.

Gran panorámica del valle cuaternario del Guadalfeo y de la Contraviesa, cubierta de almendros, vides e higueras y coronada por el Cerrajón de Murtas.

NB. Para conocer más detalles, incluidas fotos antiguas, en el libro Cádiar, memoria en blanco y negro. Vols. I y II.

 

Exposiciones

Exposiciones permanentes y temporales de fotografía y arte del Ayuntamiento de Cádiar (en las salas pertenecientes al Ayuntamiento de Cádiar en la Plaza España).

Rutas de Senderismo

PR-A25: une Cádiar y Mecina Bombarón.
PR-A32: sendero de corto recorrido que transcurre entre Cádiar y el Barranco Oscuro, en la Sierra Contraviesa.
GR-7: en este caso hablamos de un sendero de largo recorrido que transcurre desde Lobras hasta Cádiar por el río Guadalfeo (tramos IV y V).
GR-142: de largo recorrido, discurre entre Lobras y Jorairátar pasando por Cádiar (tramos V y VI).
SL-A 49: ruta de monañismo «Las Acequias de la Alqueria» (Cádiar).
Del Mar Al cielo: subida al Mulhacén desde Almería (Berja – Trevélez) pasando por Cádiar.